Ella
en sus ojos blancos lleva una migaja de silencio
el cielo tambien calla sus pajaros
cuando mira solo reflejos
de un espejo frente a otro
los infinitos rostros se unen en su sinfin
de cascarudos recuerdos
se oscurece hasta desaparecer
entre los abismos
que entre sus manos cerradas
nacen
muertos nacen
secos de luz
de la sombra nacen
y hacia ella vuelven
Se asemeja
la noche,
dice,
a su ilusoria
soledad
pues parecen solas las estrellas
entre infinitos mares de oscuro silencio
sonoro
lo escucha,
en su sangre lo escucha
y abandona sus dientes contra la almohada
jura que aun la quiere
jura que no ha olvidado.
Sabe que la luna es su madre
y le pide sonriendo
que la lleve a su lecho
No sabe comportarse
en su cuerpo de mujer
Llora
de ver su herida
gritando manantiales
de desierto
Cae
a los jardines de sus sueños
donde las flores
aun existen
Se hunde en cada gota de rocio
que posa aun
sobre los petalos
Cristales con el mar adentro
le besan los parpados
Moja sus labios
prende el viento
Perfume
Ahora baila desnuda
Ahora se deja llevar
hacia los cuerpos sumergidos
en el espacio
a los labios sin miedo
que la besan entera
Sabe que volvera
otra vez
y en cada sonrisa
dibujará
lo que nunca pasó
como si realmente
jamas hubiera pasado.
Aunque si.
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